Thursday, September 14, 2006

¿Te acuerdas, Mayito?

Habla compadre. Si alguien no podrá leer nunca este mensaje eres tu, pero igual lo escribo.
¿Qué ha sido de tu vida? La última vez que pudimos convesar fue hace seis años, si pues, justo cuando reventó el chupo del video Kouri-Montesinos. Cuando se hizo evidente lo que era un secreto a voces: corrupción, coima, traición. De hecho, tu sábías más que yo: eras todo un suboficial de la Marina de Guerra (perdón, Oficinal de Mar 2da.) y conocías bien algunos de esos entripados. Yo era simplemente un estudiante de Derecho de la PUCP influenciado con toda la onda anti-dictadura, que luego se volvió anti-militarista, pregonada a voz en cuello por ilustres personajes de mi universidad, a quienes nunca imaginé que iban a acabar llamándolos como ese aperitivo hecho a base de no sé qué pescado y que aparece en los banquetes fichos, ¿sabes cuál es, no? (menos mal que acabé alejandome de ellos, choche).
En fin, habia mucho de que hablar, causa. Quedamos para conversar otro día, total, tu casa quedaba a tres cuadras de la mía y siempre caía por ahi para tirar un par de chelas, comer algo o simplemente conversar.
Un mes después hacian una pollada en tu casa, como ocurría casi todos los meses. Me pasaron la voz y estuve cerca de ir. Pero, estando solamente a media cuadra de tu casa, decidí no ir para no fallar al viejo de un pata de la PUCP, que celebraba su cumpleaños ese día.
Craso error. Hasta ahora tengo en mi cabeza una imagen de mi mismo parado en esa esquina. ¿Por qué no me animé a ir, aunque sea un rato?
De hecho te hubiera encontrado. De hecho hubiéramos conversado, tragos van y vienen. Quizá hasta me hubieras contado por qué te sentías preocupado, por qué te alejaste de los demás, por qué te fuiste a tu cuarto, por qué agarraste tu correa, por qué...
No sigo, porque el final ya lo sabes. Yo me enteré al día siguiente, medio resaqueado.Fui a tu casa, te espere, llegaste, te ví, pero ya no podías hablarme ni hacrme una señal. Hasta ahora.
Hermano, debes saber que durante mucho tiempo me jodía a mi mismo pensando que pude haber hecho algo para evitar todo eso. Ahora me doy cuenta que era inevitable.
Al menos sé que me estás cuidando, y mucho, porque de lo contrario hace rato te hubiera acompañado.
Bueno, promoción, te dejo. No quiero que piensen que vivo en el pasado. Pero sí quiero que sepan que es mejor decir o gritar las cosas cuando es posible decirlas y no guardarlas para uno mismo. Creo que tengo razon, ¿no?

1 Comments:

Anonymous Anonymous said...

Hola Aurelio, me parecio bien interesante lo que escribiste de Mayito y dejame decirte que yo también pense lo mismo, si yo hubiese ido a esa pollada quisas las cosas podian haber sido diferente, pero ni modo las cosas pasas por algo y espero que los que conocimos a mayo nunca lo olvidemos

Nos vemos Aurelio chauuuuu

May 08, 2007 8:31 AM  

Post a Comment

Subscribe to Post Comments [Atom]

<< Home